domingo, 12 de mayo de 2013

ENCONTRA EL BULLING EN URUGUAY VASTA

Hostigamiento escolar, que genera aislamiento y hasta suicidios. Opinan los expertos y las víctimas. Uruguay está cuarto en Latinoamérica en casos de bullying.

Según los datos disponibles, un 30% de los estudiantes uruguayos reconoce haber sufrido bullying, lo cual coloca al país como cuarto en Latinoamérica.
El acoso u hostigamiento escolar, también conocido como bullying, es cualquier forma de maltrato físico o psicológico verbal sistemático entre escolares o liceales. Esto suele generar miedo a ir a la escuela, depresión, aislamiento o incluso el suicidio.
Para que suceda se necesita un hostigador, un niño malo, que viene con carencias, que necesita compensar a partir de someter al otro, inflingir miedo y ser el fuerte, explicó Lorena Estefanell, psicóloga especialista en niños y adolescentes.
Además, se precisa una víctima, un chico con carencias, que no se sabe defender, que le cuesta participar en grupos, que generalmente está solo y por eso se suele transformar en víctima. Finalmente, el círculo se completa con un grupo de espectadores, que son los que mantienen estas situaciones, que no se meten porque le temen al hostigador.
Estefanell dijo que una cosa muy importante es fomentar la denuncia de estas situaciones por parte de ese grupo de espectadores, ya que “el mundo de pares es un mundo que regula”. De todos modos, aclaró que se busca que se hagan las denuncias en forma grupal, ya que “no se puede pretender que lo hagan solos, porque eso los convertiría a ellos en una víctima”.

En Uruguay no hay un protocolo que regule qué hacer en estos casos. Cada institución actúa de acuerdo a sus casos y a sus posibilidades. “Lo peor que puede hacer una institución es esconder estas cosas, mirar para otro lado”, Rodolfo Shulze, profesor del liceo 55.
“La estrategia más simple es echar al hostigador y cambiarlo de colegio, pero con eso lo estás revictimizando y si no ayudás a la víctima a defenderse le va a volver a pasar”, agregó la psicóloga Lorena Estefanell.
La tecnología y las redes sociales complican un poco más el tratamiento y combate del bullying, aumenta mucho la indefensión y de hecho genera que este problema siga a la persona incluso cuando se cambia de país.
Micaela, de 18 años, sufrió bullying y contó a Subrayado su experiencia. Dijo que no salía de su cuarto, que llegó a lastimarse a ella misma y a tener mala relación con su familia y sus amigos. Pero logró salir y ahora cuenta que lo importante es darse cuenta de que “si vos no te sentís inferior a una persona esa persona no se puede aprovechar de vos”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario